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7008 con 0 uRanks#bodega del somontano: HORRIBLE EXPERIENCIA!!! El parking sombreado, el aire acondicionado altísimo y el ambiente rústico invitan a quedarse, aunque la mala educación de algún de los clientes habituales pasado de vino suele provocar la indigestión de la poco esmerada cocina.
Con su camisa de los domingos parece un señor antes de alzar la copa, pero en el transcurso de la comida el pobre desgraciado va alzando la voz hasta que empieza a gritar e insultar a los demás clientes aludiendo que él es aragonés y tiene más derechos. En algunas ocasiones incluso ha provocado peleas.
Lo asombroso es que el propietario se queda ahí plantado mirando y sólo tiene hagallas para traerte la factura con cara de momia.
hace 1 decade 3 años
Con su camisa de los domingos parece un señor antes de alzar la copa, pero en el transcurso de la comida el pobre desgraciado va alzando la voz hasta que empieza a gritar e insultar a los demás clientes aludiendo que él es aragonés y tiene más derechos. En algunas ocasiones incluso ha provocado peleas.
Lo asombroso es que el propietario se queda ahí plantado mirando y sólo tiene hagallas para traerte la factura con cara de momia.
hace 1 decade 3 años
#bodega del somontano: HORRIBLE EXPERIENCIA!!! El parking sombreado, el aire acondicionado altísimo y el ambiente rústico invitan a quedarse, aunque la mala educación de algún de los clientes habituales pasado de vino suele provocar la indigestión de la poco esmerada cocina.
Con su camisa de los domingos parece un señor antes de alzar la copa, pero en el transcurso de la comida el pobre desgraciado va alzando la voz hasta que empieza a gritar e insultar a los demás clientes aludiendo que él es aragonés y tiene más derechos. En algunas ocasiones incluso ha provocado peleas.
Lo asombroso es que el propietario se queda ahí plantado mirando y sólo tiene hagallas para traerte la factura con cara de momia.
hace 1 decade 3 años
Con su camisa de los domingos parece un señor antes de alzar la copa, pero en el transcurso de la comida el pobre desgraciado va alzando la voz hasta que empieza a gritar e insultar a los demás clientes aludiendo que él es aragonés y tiene más derechos. En algunas ocasiones incluso ha provocado peleas.
Lo asombroso es que el propietario se queda ahí plantado mirando y sólo tiene hagallas para traerte la factura con cara de momia.
hace 1 decade 3 años
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